Sí, las familias también sois destinatarias de la orientación académica y profesional… No os he olvidado :-)
He recibido estos días numerosas llamadas y correos de madres (más que padres aunque el «detalle» poco importe en este asunto) de alumnos mostrando su inquietud por el camino que deben seguir sus hijos.
Como os he dicho a cada uno de vosotros por distintos medios, no tengo ningún inconveniente en entrevistarme individualmente con los que así lo habéis requerido, pero no antes de que tengáis toda la información (salvo excepciones).
Próximamente, como viene siendo habitual en los últimos años, celebraremos las reuniones de orientación para familias. A ella asistimos el Director, Javier Vidal, y yo en calidad de Orientadora. Los destinatarios son los padres (familias o tutores) del alumnado de 3º y 4º de ESO y 1º de Bachillerato. También convocaremos a las familias de los alumnos que se incorporarán a Bachillerato desde otros centros. A ese encuentro asistiréis teniendo la información que ya he proporcionado a los chicos con antelación y será el momento de mostrar vuestras dudas e inquietudes.
Los temas de carácter exclusivamente personal podéis consultarlos conmigo personalmente, pero creo que es importante tener antes esa reunión informativa donde muchos de vuestros interrogantes quedarán sin duda resueltos.
La programación de estas reuniones la coordina la Jefa de Estudios, María José Montes, quien ya tiene las fechas para su celebración. Aunque os convocaremos a través de vuestros hijos en tiempo y forma adecuados, pondré aquí el calendario de reuniones.
Me ha sorprendido que alguna madre insista en que la decisión es «de casa». Celebro esta implicación familiar de la que, cierta y desgraciadamente, algunos alumnos adolecen. Sin embargo, mi opinión no es exactamente ésa, sino ésta: la decisión sobre el itinerario académico-profesional de los alumnos es de éstos sobre todo. Los padres (entiéndase las familias o tutores) tienen el mismo papel que yo: el de orientar, pero jamás el de trazar un camino que debe responder a una decisión que es -o debería ser- sobre todo personal.